¿CÓMO SE CUENTAN LOS VOTOS EN LAS ELECCIONES? LA LEY DE D'HONDT

Osoposo se ha propuesto fundar un partido político y presentarse a las próximas elecciones, y por primera vez se ha planteado cómo se reparten los escaños según los resultados electorales.

En nuestro país, y en muchos otros como Francia, Portugal o Suiza, se utiliza el Método de D’Hondt, ideado por el jurista (abogado) belga Victor D’Hondt en 1878. Se trata de un método matemático para convertir los votos a escaños. El propósito es asignar escaños de forma proporcional al número de votos recibidos, pues hacerlo de forma exacta es algo difícil, ya que no se puede asignar un número decimal de escaños.

Cada una de las provincias españolas representa una circunscripción (o conjunto de electores, es decir, personas con derecho a voto), y tiene asignados un mínimo de 2 escaños. Ceuta y Melilla eligen uno cada una de ellas.

Según nuestra ley electoral, para distribuir los escaños se siguen las siguientes reglas:

1. Se descartan las candidaturas que han obtenido menos del 3% de los votos válidos de la circunscripción.

2. En una columna se ordenan de mayor a menor las cifras de votos obtenidas por las demás candidaturas.

3. Se divide el número de votos obtenidos por cada candidatura por 1, 2, 3, etc., hasta un número igual al de escaños correspondientes a la circunscripción.

4. Los escaños se asignan a las candidaturas que obtengan los cocientes mayores, según un orden decreciente.

Veamos un ejemplo práctico. Supongamos que junto al partido de Osoposo (Partido A), se presentan cuatro partidos más para repartirse los cinco escaños correspondientes a su circunscripción. En la siguiente tabla se muestra el resultado de los cocientes:

Partido	Votos	:1	:2	:3	:4	:5
A	60.000	60.000	30.000	20.000	15.000	12.000
B	40.000	40.000	20.000	13.333	10.000	8.000
C	25.000	25.000	12.500	8.333	6.250	5.000
D	10.000	10.000	5.000	3.333	2.500	2.000
E	1.000

El Partido E no puede aspirar a tener un escaño pues no alcanza el mínimo del 3% del total de los votos, en este caso no llega a los 4.080 votos necesarios.

Según los resultados obtenidos, los cinco escaños se asignan a las cinco cifras más altas (marcadas en color beis), independientemente del partido al que pertenezcan. De producirse un empate, el escaño se le otorgaría al partido con mayor número de votos.

El número de escaños que se asigna a cada circunscripción es proporcional al número de habitantes. Esto supone que el número de votos necesarios para obtener un escaño en las provincias menos pobladas sea menor que en las más pobladas. También que si un partido tiene sus votos repartidos en varias provincias obtenga menos escaños que otro que tenga a todos sus votantes concentrados en una sola provincia o circunscripción.

A la vista de los resultados en su circunscripción, ¡Osoposo tiene posibilidades!